FENCES

Fences: una historia de Denzel Washington para Denzel Washington. Así es como he vivido “Fences”. Como una magistral clase de interpretación del señor Washington, además muy bien acompañado por Viola Davis, que no se merece el Oscar a la mejor actriz de reparto, no, no se lo merece, se merece el Oscar a la mejor actriz, pero bueno, ganar el Óscar a la mejor actriz de reparto ya es una buena carta de presentación y si encima la avalan dos nominaciones anteriores no era de extrañar que pronto levantará el Oscar, esta mujer tiene varias interpretaciones magistrales, y no me sorprendió cuando salió su nombre elegido en la última edición de los Oscar.

Troy Maxson (Denzel Washington)

En cuanto a la otra parte importante de “Fences”, Denzel Washington, era mi caballo ganador para esa gala, suerte que esta vez no aposte nada como cuando ganó Leo. Llevaba una racha muy buena prediciendo el ganador durante dos años, con Leo y antes con Eddie Redmayne, pero con Denzel hice un tiro en ciegas. No vi la película y supuse que se lo darían a Denzel, en parte porque es un actor que no necesita presentación  y apenas los 2:30 minutos del tráiler me dejaron ver que se lo merecía pero es que además, dado que al año anterior había existido cierta polémica con los “Oscar so White” ante la falta de nominaciones afroamericanas supuse que en esta se redimirían dándole el premio a un actor negro, sobre todo cuando ese actor es todo un referente como Denzel, pero bueno, me equivoque y Denzel no se pudo llevar a casa su tercera estatuilla.

Troy junto a su esposa Rose (Viola Davis)

Troy Maxson (Denzel Washington) vive junto a su mujer Rose (Viola Davis) y su hijo Cory (Jovan Adepo). Troy trabaja como basurero junto con su amigo de siempre Bono (Stephen Henderson), como están en los años 50 son testigos directos de como la sociedad no permite avanzar a los negros, pueden trabajar recogiendo las calles detrás de un camión de la basura, pero no pueden conducir dicho camión, un oficio reservado a blancos. Troy lucha por sus derechos ya que no es la primera vez que el hombre blanco trunca su destino por ser negro, ya lo vivió de joven,  cuando era uno de los mejores jugadores de béisbol, pero tenía que pertenecer a la ligas menores  y en un equipo formado solo por negros, mientras que veía que otros jugadores mediocres, conseguían jugar en equipos importantes solo por ser blancos.

El mejor amigo de Troy es Bono (Stephen Henderson)

Troy es un jugador frustrado y le está pasando sus miedos a su hijo Cory, quien solo quiere jugar al rugby mientras que cumple con sus obligaciones. Algo que no le hace gracia a Troy, quien no quiere que su hijo sufra la discriminación que él sufrió en carne propia.

La filosofia de Rose bien mereceria otro apartado

Troy tiene otro hijo más mayor, Lyons (Russel Hornsby) de otro matrimonio anterior.  A pesar de que Lyons está casado y tiene su propia casa, a menudo le pide dinero prestado a su padre, ya que su pasión por la música y tocando en algún que otro garito, no le alcanza para sus gastos. Raynell (Saniyya Sidney) es la tercera hija y la más joven.

Cory (Jovan Adepo) también demuestra habilidad en el deporte como su padre

El círculo familiar lo cierra Gabriel (Mykelti Williamson) el hermano de Troy, quien tiene problemas mentales, no es agresivo, al contrario, es casi como un niño y Troy le sigue cuidando a pesar de que ya no viven juntos.

Lyons (Russel Hornsby) el primero hijo de Troy y Gabriel (Mykelti Williamson) el hermano de Troy

La historia, transcurre a menudo en el porche trasero de los Maxson, donde conocemos la historia de Troy, tanto la realidad como historias locas que él cuenta para expectación de sus oyentes. En ese mismo porche también ocurren los mayores, llamémosles enfrentamientos, entre Troy y su hijo Cory, las charlas con su amigo Bono y una botella de alcohol y las muestras de cariño y de sacrificio de un matrimonio que dura 18 años.

Raynell (Saniyya Sidney) llega cuando Troy ya tiene 53 años

Para mí ha sido un peliculón. Sí. Y me dio pena no ir a verla en cine, sencillamente porque en mi cine de siempre tuvieron la osadía de no proyectarla. Filmada casi como lo que era, una obra de teatro y tan sencilla como puede ser el decorado del patio de una casa, tan solo 7 protagonistas, la discriminación vivida en primera persona en una época donde ni siquiera estaba mal vista, las idas y venidas de una familia obrera y 2 interpretaciones para hacer escuela. Eso ha sido “Fences” para mí. Su recaudación ha sido de más de 50 millones de dólares, casi una limosna para lo que recaudan las superproducciones, pero habría que añadir que ha sido realizada con un presupuesto modesto de 5 millones de dólares, resultando ser una de las más baratas, junto con “Moonlight” en ser candidatas para mejor película  en los Oscar del 2016.

Padre e hijo tienen su forma distinta de ver la vida

Hablando de los Óscar, puede que la que brillase con luz propia fuera Viola Davis cuando ganó la estatuilla a mejor actriz de reparto, pero es que también llevaban nominaciones, como he dicho para la mejor película, además el de mejor guion adaptado y el mejor actor: Denzel Washington, mi apuesta para esta edición y la poca gracia que tiene el no haber acertado por tercera vez consecutiva, pero menos gracia le debió de hacer a él, tras ver su cara cuando resonó otro nombre en el Teatro Dolby

En estas charlas nunca suele falta una botella

“Fences” se estrenó en Broadway en 1985, valiéndole un premio Pulitzer y un premio Tony. En 2011, la obra volvió a estrenarse sobre las tablas, con un casting de lujo como Denzel Washington, Viola Davis y Stephen Henderson, los mismos que repetirian en la pelicula del 2016

"Fences" en teatro

Esta obra fue creación de August Wilson, en total son una serie 10 obras denominadas “Ciclo Pittsburg” que trata sobre la historia de los afroamericanos durante el siglo XX. Para Broadway la dirigió Kenny Leon y para la pantalla grande la dirigió el propio Denzel Washington,  casi a petición de August Wilson, quien entendía que la dirección de “Fences” debía ser hecha por un afroamericano. Con “Fences”, Washington ya ha dirigido tres largometrajes, a excepción de un capítulo de “Anatomía de Grey”. Pero Denzel hace “triplete” pues además de dirigirla y protagonizarla también ha asumido el rol de productor. Un trabajo colosal de Denzel, ya que aunque la película no se puede considerar como superproducción, no cuenta con efectos especiales, ni siquiera con demasiados decorados y apenas una ligera alteración en los vestuarios y vehículos para recrear los años 50, lo cierto es que son 139 minutos de película y estoy segura que habría muchísimo metraje más, pues he llegado a contar hasta 23 actores que han sido desacreditados en el metraje final dejando solo a los 7 protagonistas y algún que otro figurante perdido. 

 

Denzel es actor, productor y director.

Como siempre, ha sido un honor ver trabajar al Señor Washington delante de la cámara pero también me ha gustado ver su faceta como director. Seguramente ver la película antes de los Óscar, no hubiera alterado mi posición respeto a quien debería haberse proclamado mejor actor.

Troy y Cory trabajando juntos haciendo una valla.

PD: El titulo original "Fences" ha sido respetado para el pueblo latino, y el titulo cobra sentido cuando descubres que la traducción viene a ser algo como "Valla" en referencia a lo que Troy anda trabajando en el patio de su casa.

By Eva.